Este es el primero de una serie de artículos, en los que hablaremos sobre las tarifas de luz más comunes entre las compañías eléctricas. Vamos a desgranar las bondades y perjuicios de las tarifas que las principales compañías ofrecen, explicando lo bueno y lo malo de cada una.
La tarifa plana
Por llamarla de alguna manera y para aprovechar el tirón que las compañías de telefonía han generado con estas tarifas, el sector eléctrico junto con sus departamentos de marketing, aprovecharon para utilizar ese nombre y crear una tarifa nueva, que aprovechara los miles de clientes que en su día, quedaron muy contentos al contratar una tarifa plana de internet o de minutos ilimitados en telefonía.
Pero nada más lejos de la realidad, porque con estas tarifas ni te van a dar kW ilimitados, ni vas a pagar lo mismo consumas lo que consumas. Existen dos modalidades para esta tarifa.
Modalidad bono de consumo
En esta modalidad, en el momento de la contratación se define un bono de kW que se consumirá a lo largo del año, que al dividirlo entre los doce meses dará una cuota mensual, estableciendo ésta como la tarifa plana que se pagará cada mes.
Contra mayor sea el consumo, a mejor precio podremos acceder, que es al fin y al cabo lo que nos interesa a todos. Si excedemos del consumo calculado en el bono, pagaremos una penalización a un precio establecido, que seguramente será muy superior.
Modalidad mismo pago todos los meses
Esta es la más común y sin duda la peor en cuanto a precios. Principalmente se define una cuota a pagar cada mes, entre unos rangos, cada mes se consuma lo que se consuma, pagaremos lo mismo. Pero cuando pase un año, seremos automáticamente regularizados, recibiendo una factura por todo lo que no hemos pagado durante todo el año.
Existen casos en los que el precio de la regularización, simplemente es el mismo que establecimos al principio, pero también existen casos en los que ese precio variará, casi siempre a favor de la comercializadora.
Bondades y perjuicios de las tarifas planas de luz
A simple vista el mayor perjuicio, es que parece una estafa, dado que en ningún momento vamos a tener una tarifa plana como tal, pagaremos los kW que consumamos sin perdón. Otra de las cosas que no vemos bien de esta tarifa es su último pago, este puede ser totalmente desmesurado y destrozar una economía familiar. Tampoco los precios son especialmente buenos, quitando en algunas de la modalidad bono.
Cosas buenas de las tarifas planas, pocas, principalmente podemos acceder a financiarnos gratis, si tenemos una paga extra o un pago que sabemos que nos realizarán, tendríamos la posibilidad de financiarnos durante unos meses, hasta la llegada de ese pago. En el caso de que sepamos muy a ciencia cierta, cual es nuestro consumo y si encima éste es muy estacional ( tenemos una casa de verano y solo consumimos mucho cuando estamos en ella ) con un bono distribuiríamos todo ese consumo, a lo largo de un año, pagando en cómodos plazos.